La Cúpula de la polémica.

El 10 de septiembre de 2007 comenzaron los trabajos en la cúpula blanca de la sala de la ONU (arriba).Durante más de nueve meses el artista mallorquín Miquel Barceló ha pintado la sala de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra. Los 1.400 metros cuadrados de techo blanco se han convertido en un mar agitado y una cueva llena de color.
Miles de kilos de pintura.
Miquel Barceló empleó dos años de trabajo y un equipo de 15 personas para completar su obra, que ahora presidirá la sala, que a partir de ahora pasa a llamarse Sala de los Derechos Humanos y de la Alianza de las Civilizaciones.

LA POLÉMICA:
- Coste total de la remodelación de la sala: 20 millones de euros.
- Aportación del Gobierno español: 8 millones de euros (40%).
- Contribución de la Fundación Onuart: 12 millones (60%). En la fundación participan una quincena de entidades privadas.
- Partida del Gobierno con cargo a los Fondos de Ayuda al Desarrollo: 500.000 euros.
- Honorarios de Barceló: 6 millones (30%).
Dejando de lado si se debía o no pagar con dinero destinado a otro fin, no cabe la menor duda de la magnitud y excelencia del trabajo, un trabajo que juzgará el tiempo y que nuestros nietos seguramente estudiaran al igual que nosotros lo hicimos de los grandes maestros del Renacimiento.
La obra es tan grande que resulta inabarcable para la mirada.
Miguel Zugaza, director del Museo del Prado, definió la pieza como "la más importante de Barceló y el mejor proyecto público cultural realizado por España en varias décadas".

Dato curioso:
Hay quien ha comparado ésta espectacular obra con la realizada por Miguel Ángel en la capilla Sixtina.
Miguel Ánfel, el artista mejor pagado del Renacimiento hubiese cobrado el equivalente a 400.000 euros por los 1.100 metros cuadrados del techo de la Capilla Sixtina,según investigadores del Museo Británico.